perVERSIONES )http://vimeo.com/channels/281343/28426846

(Véanse enlaces a algunas canciones mas abajo)

www.fatima-miranda.com


ALGUNAS CANCIONES    perVERSIONES 
Après un Rêve (Gabriel Fauré) http://vimeo.com/channels/281343/28676459
La Llorona (Popular Mexican) http://vimeo.com/channels/281343/28431843
Walk on the wild side (Lou Reed) http://vimeo.com/channels/281343/28431360
La Diva de L'Empire (Eric Satie) http://vimeo.com/channels/281343/28430502
Chega de Saudade (Antonio C.Jobim) http://vimeo.com/channels/281343/28430663
Du bist die Ruh (Franz Schubert)  http://vimeo.com/channels/281343/28431717
Alfonsina y al mar (Ariel Ramírez) http://vimeo.com/channels/281343/29005288
 La Bámbola (F.Migliacci, B.Zambrini, R.Cini) http://vimeo.com/channels/281343/28431029
 La Internacional (Pierre Degeyter)  http://vimeo.com/channels/281343/28432586

PROGRAMA
I. DIOSES: RUEGOS Y PREGUNTAS
Salmo Copto   ANÓNIMO
Composición para Raga Bhairavi   TRADICIONAL INDIA
Saeta   F. MIRANDA - TRADICIONAL ESPAÑOLA

II. LÁGRIMAS
Flow my tears (para John Cage)   JOHN DOWLAND
Cry me a river   ARTHUR HAMILTON
La llorona   POPULAR MEXICANA

III. LUCHA LIBRE
La Internacional   PIERRE DEGEYTER
Walk on the wild side   LOU REED
Estranha forma de vida   ALFREDO DUARTE

IV. MIELES Y HIELES
Ojos verdes   VALVERDE, LEÓN y QUIROGA
El árbol del olvido   ALBERTO GINASTERA
La Bambola    F.MIGLIACCI, B.ZAMBRINI, R.CINI

V. LO JAMÓN NO QUITA LO JAPÓN
Sutra Hannya Shingyo   TRADICIONAL JAPONESA
Entre Salamanca y Samarkanda II   FÁTIMA MIRANDA

VI. NO MORE BLUES
Du bist die Ruh (por ballenas)   FRANZ SCHUBERT
Chega de Saudade   ANTONIO CARLOS JOBIM
La diva de l'Empire   ERIK SATIE

VII. ADIOSES
Alfonsina y el mar   ARIEL RAMÍREZ
Strange fruit   LEWIS ALLAN
Après un rêve   GABRIEL FAURÉ

SOBRE
perVERSIONES

Idea original, dirección y cantante performer
Fátima Miranda

 Pianistay arreglos para piano
Miguel Ángel Alonso Mirón

Fotografías para la escenografía
Chema Madoz

Fátima Miranda siempre compuso y cantó su obra empleando insólitas técnicas vocales, inventadas o aprendidas de culturas tradicionales de Oriente y Occidente sobre un registro de 4 octavas.Con su voz llegó tan lejos, que lo extraordinario para ella en esta ocasión  es llegar tan cerca, cantando  como siempre lo hizo y  también como nunca, canciones de toda la vida. Todo un reto.
El repertorio se ha elegido desde la certeza de lo que a uno le toca o le conmueve, sin afán de exhaustividad cronológica o temática. Melodías medievales, lamentos, lieds, cantos de chamanes o ragas, se entrelazan en perfecta armonía con standards de jazz, copla española, canción pop, fado o chanson, creando un mapa sin fronteras que a su vez se dirige a y emerge de la memoria colectiva. 
Entre las múltiples maneras de entender  el concepto de interpretación cabría destacar dos, una hermenéutica y poética con la que se identifica perVERSIONES, que tiene que ver con la idea de traducción y cuya meta es la experiencia, y otra, la más frecuente, conservadora, mimética y kitsch, no poética, que es simple remedo, refrito o tarjeta postal, cuyo objetivo es el mero entretenimiento, que no interesa en absoluto. 
El concierto se estructura en 7 partes o atmósferas, cada una integrada por 3 ó 4 canciones. Contención íntima y extroversión se alternan, armonizando lo cotidiano y lo elevado, hacia un resultado lleno de gracia, unidad y sentido.
A la escenografía contribuyen las fotografías  creadas ad hoc  para perVERSIONES por el insigne Chema Madoz. La colaboración entre estos dos artistas nace de un especial entendimiento y de afinidades fundamentales. Ambos inclasificables, ingeniosos e irónicos. Los dos, amantes de lo sencillo y frágil llevado al límite del rigor y de la perfección, siempre al servicio de las ideas y del sentimiento poético. En las obras de Chema y de Fátima lo cotidiano deviene extraordinario, induciéndonos a una visión imaginativa y crítica de la realidad y a niveles de poesía y humor que nos brindan siempre un saludable terreno para la reflexión. 
En escena una cantante, un pianista y un piano. Un escenario exento de todo efectismo: un magistral diseño de luces y un espléndido vestuario envuelven cada momento en su clima justo, y puntualmente un lento fundido de imágenes realizadasporChema Madoz, flotando sobre un soporte no convencional, mas próximo a los visillos de una alcoba que a una pantalla. Lo musical y visual así como la dramaturgia quedan integrados en un todo sensitivo y orgánico
Miguel Ángel Alonso Mirón, pianista osado y riguroso, obsesionado por  la interpretación escénica del repertorio vocal, es el músico perfecto para  un concierto en el que el piano no es  mero servidor de la voz, sino un instrumento multitímbrico, y en el que el pianista deviene performer en complicidad con Fátima, ofreciendonos  juntos un  espectáculo  muy serio que destila juego, humor y  poesía.
El título perVERSIONES, nos hace un guiño que encierra toda una declaración de principios y nos permite intuir cómo las canciones elegidas, populares o cultas, son capaces de aportarnos otro sabor, otra escucha, otro sentir…  






Cantos   Robados

(resumen 26 min) http://vimeo.com/channels/281343/28656671

 

ENLACES A VIDEOS DE VARIAS OBRAS

Arrobada http://vimeo.com/29719169

Aire Desoriental  http://vimeo.com/36236689

Entre Salamanca y Samarkanda http://vimeo.com/29011091

Onomatropeya http://vimeo.com/29635645

Respiros de España Blues  http://vimeo.com/29009687

 

 


Cantos Robados

En estos tiempos en  que todo vale, parece oportuno reflexionar sobre el justo significado de términos tan manidos y desvirtuados como original, moderno, postmoderno, vanguardista o experimental, cuando nos referimos a las expresiones artísticas más recientes. La cultura global de estas últimas décadas parece estar de vuelta de todo, incluso de las vanguardias artísticas. Ya Antonio Machado ironizaba sobre quienes están de vuelta sin haber ido. ¡Vayamos!, vayamos pues cuanto antes, no hacia atrás, sino hacia lo esencial, hacia el conocimiento/cimiento de las tradiciones olvidadas, asimilemos lo primitivo, lo antiguo, lo clásico, ¡robémoslo!, descubramos sus arquetipos para poder hacerlos nuestros y para, una vez aprehendidos, poder al fin volver, volver de verdad, impulsando un arte nuevo, una poética otra.

Imitar y copiar  es indigno. Robar, apropiarse de las fuentes para poderlas integrar, digerir y olvidar, trascendiéndolas y convirtiéndolas en otra cosa, puede por el contrario dar lugar a un arte original, un arte sin artificio. La obra de arte únicamente puede ser el resultado de un proceso: ni se crea ni se elige. Todo está ahí. Las musas no existen, lo nuevo tanto en arte como en ciencia, es un secreto a voces a la espera de ser desvelado.

El título Cantos Robados nos hace un guiño que encierra toda una declaración de principios al plantearnos esa necesidad de proceso, de vagar y perderse por largos caminos, tropezando entre cantos rodados, tras un constante ir y venir, bucle/eterno retorno realimentado de antiguas raíces, hoy  transmutadas y depuradas en un atanor por el que han transitado infinidad de culturas musicales y las más atractivas, complejas y extrañas prácticas  vocales del laberíntico etnomundo, logrando así ponerlas en diálogo fecundo, mestizo y renovado, para  poder aportar otro sabor, otro canto.

Hija de una sensibilidad etnomínimal, Fátima Miranda da la espalda a la tiranía de los cánones de belleza del canto y de la palabra y se pone, nunca mejor dicho, el mundo por montera, entrando a saco y sin miedo en el bosque de oralidades que aun lo pueblan: las albórbolas bereberes, los irrintxis vascos, los microtonos de la raga india, las murgas de griots y chamanes, las melopeas dionisíacas, las difonías mongolas y tibetanas, los yodels pigmeo, iraní, canario o tirolés, las voces nasalizadas corsas, indonesias o chinas, los gritos-interjección del teatro y del Kabuki japonés, los exabruptos desgarrados del Pansori coreano, el scat del jazz, el cante jondo o el más sublime canto sagrado – ya se trate del Dhrupad indio, el Shomio budista, los Sutras zen, el Corán de los almohedines, el Gregoriano cristiano, el canto Bizantino o el Qawali sufí –, devienen así para ella  un manjar  y un lenguaje tan usual como el bel canto o el sprechgesang, cargado de memorias fonéticas, tal vez anteriores al lenguaje, evocadoras de códigos de comunicación ya extinguidos que anidan en el inconsciente colectivo.

La dramaturgia de Cantos Robados se halla estructurada en dos grandes bloques. Una  primera parte  de carácter ritual, contenido e interior, durante la cual la cantante parece flotar arrobada en las alturas, esculpiendo el aire con voz  de cristal o de trueno, de  Orientes y Desorientes, de anciana matriarca o de sirena, generando la necesaria complicidad que tan rotunda presencia impone, y una  segunda parte a pie de tierra, de ambiente mas alegre y  profano. Todo ello bañado por una mirada irónica sobre la presencia de lo sagrado en lo doméstico.

En escena, una voz y el gesto de una sola cantante que interactúa con un monumental y versátil traje-escenografía de fisonomías cambiantes, sugeridor de arquitecturas y paisajes varios (carpa, casa, ábside o volcán), propiciados por un cuidado diseño de luces. Cantos Robados, genera tantas lecturas como espectadores, cada una nutrida y filtrada desde el bagaje personal, el inconsciente y la imaginación de cada espectador y no desde fórmulas de atención preestablecidas.

La colaboración entre Fátima Miranda y la escenógrafa Mirella Weingarten nace de un especial entendimiento. Capaces ambas de elevar a categoría de arte, objetos, actitudes o elementos domésticos ante los que pocos pararían mientes, estas dos artistas, osadas y sin exhibicionismos gratuitos, se mueven en aquellos límites en los que a veces  algo  parece estar a punto de quebrarse. En la estética de ambas hay algo de arcaico e intangible que parece transportar al espectador lejos del mundo, sumergiéndole en una atmósfera elegantemente sensual, mientras una actitud irónica hacia lo kitsch y lo grotesco destila juego, alegría y hasta un punto de divertida y sabia locura. Contención íntima y extroversión coexisten en una síntesis que armoniza lo cotidiano y lo sublime

Entre Salamanca –ciudad natal de la artista, donde estudió Letras– y Samarkanda –de camino a la India, donde estudió música–, entre Occidente y Oriente, entre la tradición y la vanguardia, se encuentran los  campos  por  los  que metafóricamente transitan y brotan estos Cantos Robados, cuanto más rodados más robados !